DDC: Salir del auditorio

 Aquel temblor no pudo significar nada bueno y lo sabes bien, pero, entonces, no sabes qué hacer, a dónde ir o si siquiera correr o no.

Notas como todo rastro de luz va desapareciendo poco a poco, lentamente. Esto más ls tenebrosas manchas en las paredes, que te piden quemar algo que aún sabes qué es, te dan escalofríos y casi como si fuera parte de lo más puro del instinto de supervivencia que los humanos tenemos, empiezas a correr fuera del auditorio.

Una vez sales, te das cuenta de que la oscuridad empieza a sentirse más. Es pesada y abrasiva.

Entonces, decides...

Prender el encendedor

Quedarte quieta